Vivimos en una sociedad en la que sus miembros se creen que se lo merecen todo. Eso no es noticia, lo sé. Pero, no pude dejar de pensar en ello, al llegar a casa anoche. Había almorzado lo que pude encontrar en la cafetería de la escuela. No tuve tiempo de salir a comer. No tenía otra opción.
Al llegar a casa, cansada, agotadísima, y porque no hasta malhumorada, mi adorado gato me esperaba en la puerta para hacerme un berrinche. Se pasó el día entero sin comer, simplemente porque no le dio la gana de comer ninguna de los dos tipos de comida que le había dejado. ¡No me lo podía creer! ¡Habrase visto semejante escena!
Empezó a correr como si fuera un caballo, por todo el apartamento. Me imagino que la vecina del cuarto piso, estaba preguntándose que rayos pasaba en mi casa. Hizo todo lo que pudo para llamar la atención. Y yo, al igual que a un niño malcriado lo ignoré mientras pude.
No hubo forma de que se le pasara el berrinche a don Coco, así es que lo castigué: lo encerré en un clóset, hasta que se calmó un poco. Antes de dormirme lo saqué, esta vez comió un poco, pero pronto volvió a hacer travesuras. Era su forma de decirme que le hacía falta su comida favorita.
De niña en la Republica Dominicana, y aún hoy cuando visito, jamás he visto un gato rechazar comida. ¿Será la gran cantidad de opciones que vuelve hasta los gatos engreídos?
cuadro: Ragdoll Cat, vía yourpetartist.com
A mi encantaban los gatos cuando era niño.
ResponderEliminarEl gusto por ellos lo heredé de mi papá.
Hace años mi papá tenia un gato que cuidaba y alimentaba, siempre le guardaba una ración de su propia comida. Hasta que un dia el gato tuvo la puntada de orinarse encima de mi papá.
Hasta ahí llegó el romance, mi papá lo desterró de la casa. Entonces entendí la naturaleza ingrata del gato.
Saludos.
El problema es que en America hasta los gatos son mas ricos que sus contrapartes en Latinoamerica. Así que teniendo más poderio ellos, los gatos americanos pueden escoger entre lo que les gusta y lo que no.
ResponderEliminarNuestros gatos, los nacidos en un habitat differente no tienen esas opciones. Ellos solo conocen dos: Comer o no comer. Y ahí radica la diferencia.
Lamento que tu estomaguito haya sufrido por aquel dia, pero a la vez lamento que hayas encerrado al pobre 'Coco'
Me interesa mucho cómo sacas temas para escribir, eres genial!
jajajaja, gato berrinchudo!
ResponderEliminardèjalo con su drama, que tiene comida suficiente y tu porfa, trata de no dejar de comer o sufriràs una gastritis
Hola San Escrin, lamento la experiencia que tuvo tu padre. Por mi parte, no comparto la idea de que los gatos sean "mal agradecido" -eso crecí escuchando, jajajajja. Creo que Catas have been framed -Just like Eve, jajajajaj :P.
ResponderEliminarMilton, tienes razón. La realidad social/económica tiene mucho que ver en ello. Ah, y gracias por el piropo, el secreto es escribir del corazón, y con un toque muy personal.
Sandy, creo que ya es tarde :(. Mi estomaguito ha andado medio berrinchudo ultimamente.
Abrazos y mil gracias por su visita.