Mi otro yo

Esculcando entre mis escritos de adolescente encontré este poema. No quise editarlo por preservar el momento histórico del poema (agosto 5 de 1992), y por ende mi sentir de entonces.

Tú, mi amiga inseparable
la que conoces todos mis días,
sólo tú me comprendes
y me aceptas como soy;

Ante ti soy yo misma
es que tú misma yo soy
nada te oculto, todo lo sabes
eres mi otro yo;

Eres tú el espejo
donde me reflejo tal cual soy
restregándome verdades
que hieren mi corazón;

Soledad, amiga mía
a ti debo cuanto soy
tú siempre vas a mi lado
sólo tú sabes quién soy;

Es que somos una misma
la soledad y yo;
en el silencio nos perdemos
y nos encontramos las dos.