
Esta semana el congreso estadounidense aprobó una ley para permitir la ayuda federal para la investigación científica con células madres. Sin embargo, el presidente ha prometido vetar dicha propuesta de ley, como ya lo ha hecho en el pasado. Estados como California, ya proveen sus propios fondos para la investigación, y se espera que si la ley federal no cambia otros estados podrían hacer lo mismo. Sin embargo, sería más provechoso para la comunidad científica que todos los estudios se hicieran de una forma centralizada; es decir que todos los esfuerzos científicos se hicieran en conjunto y no que cada estado tenga su propio programa.
El 9 de agosto del 2001, Bush accedió a que se utilizaran un número restringido de embriones para experimentos. Es aquí donde yo no entiendo al Sr. Bush, y a todos los que se oponen a dicha investigación. La investigación sólo usa embriones que ya existen. Ningún científico ha propuesto crear embriones con el único propósito de hacer estudios científicos; por el contrario sólo proponen utilizar los que se desechan todos los días en las clínicas de fertilidad. En los Estados Unidos dichas clínicas producen miles de embriones para inseminación artificial, de los cuales miles son desechados o almacenados por años sin ningún propósito útil. ¿Entonces por qué no utilizarlos en vez de tirarlos? Me parece que si se trata de que es inmoral que se produzcan embriones para hacer investigación –que hasta ahora no ha sido el caso, y no es necesario debido a la gran cantidad de ellos que existen-, podríamos argüir que producirlos para posibles inseminaciones y desecharlos es también inmoral. No entiendo cuál es la necedad e irracionalidad de Bush, ya que los embriones ya existen, y van a seguir creándose, a menos que se prohiba que las parejas busquen ser padres con la ayuda de un laboratorio; lo cual sería improbable porque el gobierno no puede negarle a una pareja el derecho a ser padres.
Los Estados Unidos es una sociedad utilitarista por naturaleza; vamos al espacio, por nos conviene, vamos a la guerra porque nos conviene, ¿por qué no ser utilitarista cuando se trata de buscar posibles curas para enfermedades como el Parkinson, Alzheimers, la diabetes, el cáncer, otras tantas enfermedades que podrían encontrar una cura si se continua con la investigación científica? ¿A caso no nos dejaría beneficios económicos si encontráramos la cura para enfermedades como el cáncer? No es un secreto que las farmacéuticas se lucran a costa de las enfermedades incurables. Si viviéramos en un mundo sin dicha enfermedades perderían muchísimos clientes. Además, la población del mundo aumentaría, lo que implicaría más gastos para el gobierno y los seguros médicos. Es una lástima que Bush se jacte de defensor de la vida de los que no se han formado si quiera, mientras que con su guerra al terrorismo predica la destrucción de la vida humana como como una cuestión de ética.