La historia nos enseña que el poder corrompe al más noble de los hombres. Hemos visto lideres cuyos objetivos eran mejorar la vida de su pueblo, terminaron siendo sus verdugos. Por esto, simplemente por esto, los ciudadanos deberían vigilar muy de cerca a sus gobernantes. Sin embargo, muchos se ofuscan, y en el proceso, pierden la capacidad de pensar críticamente, reconocer los errores de los líderes y exigir un cambio de curso. A los políticos no hay que darles jamás carta blanca para que hagan y deshagan con impunidad. Ocurre a menudo que cuando el presidente actual representa nuestra ideología política, bajamos la guardia y nos olvidamos de vigilar sus acciones. Esto es un gravísimo error.
Para nadie que haya leído este blog, debe ser un secreto que yo apoyé la candidatura de Barack Obama. Sin embargo, eso no significa que tenga que apoyar todas sus equivocadas decisiones. Uso mis cuentas en Twitter y Facebook para denunciar las canalladas que comete. El criticar al niño lindo de la izquierda me ha costado varios encontronazos con sus fervientes y ciegos seguidores. A mí me da igual. Me parece increíble que gente con la que, por lo general, coincidía, hoy estoy en total desacuerdo. No es que los acontecimientos a los que nos oponíamos antes hayan cambiado, no, tal vez, estén mucho peor. Lo único que ha cambiado es el ejecutor de esas acciones.
Es tal el descaro de la izquierda que le celebra al actual presidente las mismas atrocidades que le criticaban al anterior. Me parece patético. Por ejemplo, en política internacional Obama ha sido simplemente una fuerza arrolladora. Estados Unidos está involucrado en seis guerras: Iraq, Afganistán, Somalía, Yemen, Pakistán, y Libia. La excusa más común es que Obama heredó de Bush un total desastre. Es cierto, pero, también lo es que, en muchos casos, con una orden ejecutiva Obama habría podido cambiar de curso, si lo hubiera querido, pero no lo ha hecho porque no le conviene políticamente. Tiene que preservar el statuo quo. Punto. Esa es la verdad.
Sin embargo, para la mayoría de los seguidores peleles de Obama, éste ha hecho un excelente trabajo en política extranjera, especialmente en Libia. Nada más lejos de la realidad, Obama es un digno jefe de su ejercito imperialista. En conjunto con los igualmente corruptos miembros de la OTAN, Obama invadió un país que no representaba ningún peligro para nadie. Se aprovecharon de varias coyunturas, y provocaron otras tantas, para justificar una intervención militar, cuyo único interés era preservar sus intereses económico y militares en la región.
Lo único que Obama ha hecho mejor que Bush en política extranjera es sonar menos ignorante, y formular oraciones mejores construidas, pero ¿de qué sirve eso? si al final las bombas siguen cayendo, igual que siempre, sobre gente inocente. La presidencia de Obama ha confirmado que no importa quien gobierne, Estados Unidos seguirá militarizando el planeta hasta que haya un cambio radical en la mentalidad de los ciudadanos. Hay mucha gente que no apoya el sistema, y de vez en cuando, aparece una chispa que salta con el potencial de iniciar una buena sacudida de consciencias.
Soy pesimista por obligación, y me pregunto si tal cambio es posible. La respuesta no es muy alentadora, pues, las mentes y las almas del pueblo estadounidense están totalmente envenenadas por la ambición, el egocentrismo y una falta de empatía sin limites. Por lo pronto, me sigo quejando, y mi voto jamás significará la suspensión de mi sentido crítico. Aunque eso sirva de poco, es mejor que ser una más del rebaño de ovejas que siguen al presidente incondicionalmente.
Para nadie que haya leído este blog, debe ser un secreto que yo apoyé la candidatura de Barack Obama. Sin embargo, eso no significa que tenga que apoyar todas sus equivocadas decisiones. Uso mis cuentas en Twitter y Facebook para denunciar las canalladas que comete. El criticar al niño lindo de la izquierda me ha costado varios encontronazos con sus fervientes y ciegos seguidores. A mí me da igual. Me parece increíble que gente con la que, por lo general, coincidía, hoy estoy en total desacuerdo. No es que los acontecimientos a los que nos oponíamos antes hayan cambiado, no, tal vez, estén mucho peor. Lo único que ha cambiado es el ejecutor de esas acciones.
Es tal el descaro de la izquierda que le celebra al actual presidente las mismas atrocidades que le criticaban al anterior. Me parece patético. Por ejemplo, en política internacional Obama ha sido simplemente una fuerza arrolladora. Estados Unidos está involucrado en seis guerras: Iraq, Afganistán, Somalía, Yemen, Pakistán, y Libia. La excusa más común es que Obama heredó de Bush un total desastre. Es cierto, pero, también lo es que, en muchos casos, con una orden ejecutiva Obama habría podido cambiar de curso, si lo hubiera querido, pero no lo ha hecho porque no le conviene políticamente. Tiene que preservar el statuo quo. Punto. Esa es la verdad.
Sin embargo, para la mayoría de los seguidores peleles de Obama, éste ha hecho un excelente trabajo en política extranjera, especialmente en Libia. Nada más lejos de la realidad, Obama es un digno jefe de su ejercito imperialista. En conjunto con los igualmente corruptos miembros de la OTAN, Obama invadió un país que no representaba ningún peligro para nadie. Se aprovecharon de varias coyunturas, y provocaron otras tantas, para justificar una intervención militar, cuyo único interés era preservar sus intereses económico y militares en la región.
Lo único que Obama ha hecho mejor que Bush en política extranjera es sonar menos ignorante, y formular oraciones mejores construidas, pero ¿de qué sirve eso? si al final las bombas siguen cayendo, igual que siempre, sobre gente inocente. La presidencia de Obama ha confirmado que no importa quien gobierne, Estados Unidos seguirá militarizando el planeta hasta que haya un cambio radical en la mentalidad de los ciudadanos. Hay mucha gente que no apoya el sistema, y de vez en cuando, aparece una chispa que salta con el potencial de iniciar una buena sacudida de consciencias.
Soy pesimista por obligación, y me pregunto si tal cambio es posible. La respuesta no es muy alentadora, pues, las mentes y las almas del pueblo estadounidense están totalmente envenenadas por la ambición, el egocentrismo y una falta de empatía sin limites. Por lo pronto, me sigo quejando, y mi voto jamás significará la suspensión de mi sentido crítico. Aunque eso sirva de poco, es mejor que ser una más del rebaño de ovejas que siguen al presidente incondicionalmente.
Recuerdo muy bien cuando apoyaste a Obama Barac.
ResponderEliminarPero veo que sabes rectificar, demostrando asi que no eres fanática de politicos.
Por parte, no creo en los politicos. Todos los candidatos cuando toman el poder tienen que regirse por la regla del pentágono.
Fíjate cuantos indocumentados han sido deportados en el gobierno de Obama Barac. Sin embargo cuando se acerca la campaña electoral, el tipo ya empezó a buscarle el lado a los hispanos. ¿Es que somos bobos o tarados?
Y conste que no apoyo a ninguno de los dos partidos ni a ningún candidato.
Hola Rafael,
ResponderEliminarSoy una mujer inteligente y bastante racional. No soy de las que se quedan calladas. Además, apoye un candidato, y el hoy presidente es muy distinto de aquél.
Lo que siempre he tenido claro es que la sed de dominio de esta nación ha sido la peor catástrofe que ha tenido que soportar el resto del mundo. Para revertir ese oscuro proceso habrá que cambiar muchas mentes, y francamente no lo veo tan posible en un futuro cercano. Hay mucho dinero e intereses, de todo tipo, en que las guerras y la opresión de otras naciones se perpetúe.
En cuanto a lo de las deportaciones, estoy que echo chispa. Obama ha deportado a más personas en dos años que Bush en ocho. Obama ha sido un fracaso en muchas áreas: inmigración, política extranjera, asesinatos extrajudiciales a 'enemigos' en países soberanos, violación de los derechos civiles, Guantánamo, violación a la constitución y los derechos civiles de los estadounidenses, y etc. Ha sido en mi opinión, no un presidente de izquierda, sino uno de los efectivos neo-conservadores de los últimos tiempos.
El problema no es apoyar a los partidos; es el sistema en el que ambos se desenvuelven que no permite grandes cambios. Debe mantenerse el statuo quo. Para lograr cambios, abría que desmontar el aparato opresor, sin embargo, ésa está en chino, jajajaja. Así que por ahora, seguiremos en las mismas.
Saludos y gracias por leerme.
Una muestra más de que el Estado no es manejado por el presidente elegido, sino por una política de los grupos de poder económico de ese país.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo, y mmmh.. dejame decirte, los hombres somos egoistas, egocéntricos, sin empatía e ignorantes en todos lados (lo de ignorantes se lo puse yo). Ando un poco desalentada de la humanidad, así que mejor ahí le paro =P
ResponderEliminarAbrazos! =)
Argénida, así es. Estamos en las manos de un bando de una élite económica que lo controla todo: la política, la prensa y hasta las mentes. Pero yo me resisto a creer que será así para siempre. Tengo la esperanza de las consciencias de la gente renacerán.... Es imposible contener todo un país en pies armado con la información y la determinación necesaria para liberarse, y creo que nos acercamos a ello :). El statuo quo es insostenible.
ResponderEliminarÁnimo querida Sandy, recuerda las sabias palabras: “You must not lose faith in humanity. Humanity is like an ocean; if a few drops of the ocean are dirty, the ocean does not become dirty.” ― Mahatma Gandhi
Abrazos a las dos.