sábado, 20 de diciembre de 2008

¡Seamos como el vino y el buen libro!

De niña admiraba mucho a un ser humano, luego crecí, y se perdió la admiración -por razones que no vienen al caso mencionar. El cariño aún existe pero la reverencia ya no.

¡Qué bueno sería poder conservar y transforma nuestra esencia a través del tiempo! Vivir un proceso ascendente hacia el objetivo constante de ser mejores seres humanos, inmunes a las circunstancias y al tiempo. Es una tarea difícil ya que no se trata de una meta concreta sino de un proceso en constante evolución.

No es fácil sobrevivir con nuestro ser intacto y a la vez transformado. Lo sé. Sin embargo, vale la pena por lo menos tratar de imitar el vino y el buen libro cuyas esencias evolucionan y permanecen a través del tiempo.

jueves, 18 de diciembre de 2008

Conversando con Matute

Para mí la amistad está por encima del amor, por considerarla un sentimiento más puro y mucho menos egoísta. Sin embargo, esta mañana he despertado de un largo sueño, y me he dado cuenta de que la vista nos engaña.

Esta es otra pérdida de la inocencia, mucho más dolorosa que la original. Hoy me encuentro al igual que el protagonista del cuento "El niño al que se le murió el amigo"ante una realidad cruda e inesperada, pero viceralmente real.

"El niño al que se le murió el amigo" de Ana Ma. Matute
"Una mañana se levantó y fue a buscar al amigo, al otro lado de la valla. Pero el amigo no estaba, y, cuando volvió, le dijo la madre:
-El amigo se murió.
-Niño, no pienses más en él y busca otros para jugar.
El niño se sentó en el quicio de la puerta, con la cara entre las manos y los codos en las rodillas. «Él volverá», pensó. Porque no podía ser que allí estuviesen las canicas, el camión y la pistola de hojalata, y el reloj aquel que ya no andaba, y el amigo no viniese a buscarlos. Vino la noche, con una estrella muy grande, y el niño no quería entrar a cenar.
-Entra, niño, que llega el frío -dijo la madre.
Pero, en lugar de entrar, el niño se levantó del quicio y se fue en busca del amigo, con las canicas, el camión, la pistola de hojalata y el reloj que no andaba. Al llegar a la cerca, la voz del amigo no le llamó, ni le oyó en el árbol, ni en el pozo. Pasó buscándole toda la noche. Y fue una larga noche casi blanca, que le llenó de polvo el traje y los zapatos. Cuando llegó el sol, el niño, que tenía sueño y sed, estiró los brazos y pensó: «Qué tontos y pequeños son esos juguetes. Y ese reloj que no anda, no sirve para nada». Lo tiró todo al pozo, y volvió a la casa, con mucha hambre. La madre le abrió la puerta, y dijo: «Cuánto ha crecido este niño, Dios mío, cuánto ha crecido». Y le compró un traje de hombre, porque el que llevaba le venía muy corto."
Ese niño que despertó a la vida abruscamente soy yo. Ha sido una noche larga y fría, pero hoy me levanté y me di cuenta de «Qué tontos y pequeños son esos juguetes. Y ese reloj que no anda, no sirve para nada». He pasado una noche en velo para parir un nuevo día en el que la inocencia se perdió...
Es un nuevo comienzo sin juguetes y con mi amigo muerto.
Cuento fue tomado de la página Ciudad Seva

lunes, 15 de diciembre de 2008

Bush es "zapateado" en Irak

Esta mañana al escuchar a mis estudiantes contarme de lo acontecido al Sr. presidente George W. Bush en su última visita a Irak, no pude evitar reírme -de hecho todos lo hicimos. ¿Qué haremos sin nuestro hazmereír después del próximo 20 de enero? Ya veremos cómo solucionamos tamaño problema.

Resulta que un periodista iraquí le tiró sus zapatos a Bush, y acompañó su hazaña con el siguiente mensajito: “This is a gift from the Iraqis; this is the farewell kiss, you dog!” Por suerte, para la seguridad nacional, el muy diestro presidente pudo evadir "el atentado," que casi le coloca un zapato por sombrero.
Así lo despidieron de aquellas tierras de las que algunas vez se auto-nombrara "libertador." Es cierto que uno no sabe para quien trabaja, porque convertir al defensor de "la democracia y las libertades civiles" de los iraquíes en víctima de una "zapateada," resulta sorprendente. ¿Cómo hacerle al libertador de Irak una de las mayores afrentas que se le pueden hacer a alguien en suelo iraquí? Me imagino que Bush aún busca una explicación lógica para tal "acto de volencia" contra su persona, un hombre que sólo ha luchado por el bienestar y la libertad de los ciudadanos iraquíes. ¡Qué ironía!
Vía The New York Times

PD. Increíblemente le debo a Bush el haber vuelto a mi planeta después de dos semanas.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Hasta pronto


Éste es un temporario adiós, mejor dicho, un hasta pronto. No sé cuánto tiempo estaré alejada. Tal vez una semana, tal vez un día, tal vez un mes. No lo sé.

Mil gracias a todos ustedes por pasar por mi planeta. El planeta es el mismo, y estoy segura que volverá a existir; pero, yo debo hacer una pausa, por ahora, para organizar mi mundo interno y externo... Mi email está en el perfil del blog si se quieren comunicar conmigo. ¡Adiós!