viernes, 29 de junio de 2007

El extrajero de Albert Camus

Nunca había leído El Extranjero de Camus. Me sorprendió la aparente sencillez de la novela. Las oraciones denotan la economía característica del inglés americano: desnudo de excesos y preciso en el significado. La novela está narrada en primera persona. El protagonista nos narra la historia –su historia- como si fuera un personaje ajeno a ella. No reacciona, ante nada, se limita a contar la historia. A veces me daba la impresión que yo seguía una cámara, capaz de reproducir lo que veía sin la mínima posibilidad de reaccionar ante ello.

La intensidad de las imágenes contrasta diametralmente con la simpleza, y vulgaridad de un hombre tan superficial como Meursault. Hubo momentos en que me preguntaba, ¿si podía un hombre tan simple, ser capaz de evocar dicha belleza poética? o ¿Sería que existía otro Meursault, subyugado por la figura robótica, ajena hasta para sí mismo?

Ya en la primera oración Meursault se nos revela como un hombre incapaz de sentir emociones. Recibe la noticia de la muerte de su madre con toda la frialdad del mundo; le da más importancia a cuando ocurrieron los hechos que a la muerte en sí. A él, todo le da igual. No conoce de amor, ni de sufrimientos, ni de ambición, ni de ideas. Va por la vida con el único propósito de saciar sus necesidades físicas: sentir el sol en su piel, el placer que le produce nadar, y tener relaciones sexuales con Marie, comer y dormir. Nada más.

Meursault es un espectador. Se limita a ver vivir a los que pasan frente a él, reclinado en un mueble, esporádicamente se fuma un cigarrillo, se retira a preparar algo de comer, y luego se acuesta. Vive totalmente al margen de las convicciones sociales; no le importa nada ni nadie. Sin embargo, no finge, hace y dice lo que piensa sin importarle lo que la sociedad espere de él. Esta es una conducta que la sociedad no le perdonará; por su atrevimiento se verá cara a cara con los representantes del código moral.

Para Meursault todo es igual; es decir un hombre puede casarse o no casarse, disparar una pistola o no dispararla, actuar o no actuar, pero al final nada importa. Todo da lo mismo. Esta conducta de Meursault está orientada en la concepción de Camus, de la vida como un absurdo carente de significado por sí misma; la vida es un viaje que irremisiblemente nos lleva a la nada, sin la posibilidad de otra vida. Para Camus distraerse buscándole significado a la vida en Dios y en el más allá, es una pérdida de tiempo que le resta a nuestra experiencia aquí en la tierra –la única vida que tendremos. Es por ello que el hombre debe aceptar que el viaje en sí es absurdo, y a su vez dotarlo de significado individual.

La transformación de Meursault llega precisamente cuando se encuentra ante la consecuencia de sus actos: será ejecutado. Se da cuenta que será ejecutado no por el crimen que cometió sino por no haberse adherido a las normas sociales;por decir la verdad ante un sistema que esperaba que el mintiera en su defensa, que se conformara a las reglas con las que jugaban todos. No le perdonaban que no hubiera llorado por la muerte de su madre, que no amara a Marie, que no creyera en Dios, que no tuviera un motivo que justificara su crimen y que no se mostrara arrepentido. Ante todas estas ofensas el haber matado a un hombre pasó a un segundo plano.

Al final de la novela Meurseult, acepta lo absurdo de la existencia tal cómo lo concebía Camus. Empieza a hurgar en su pasado, recuerda a su madre; se da cuenta que había pasado por la vida y no había vivido. En un acto consciente empieza a recrear su vida, a vivirla a través de sus recuerdos; cree entender por qué su madre inició otra relación en los últimos años de su vida: eso era comenzar de nuevo, equivalía a tener otra oportunidad, otra vida -como la que a él le hubiera gustado tener ahora. Su madre hizo lo que el no había hecho: había vivido. De pronto, el pasado y el futuro adquieren significado para Meursault.

Meursault insiste en no ver al cura de la prisión, porque éste no puede ofrecerle nada en su posición de mensajero de Dios; Dios no existe para Meursault, y perder el tiempo hablando del más allá, de falsas promesas, es una hipocresía en la que él no participará. Meursault se sabe otro, victorioso, y lleno de júbilo acepta su muerte, en una actitud desafiante e incomprensible para la sociedad que lo había condenado:

"As if that blind rage has washed me clean, rid me of hope; for the first time, I that night alive with signs and stars, I opened myself to the gentle indifference of the world. Finding it so much like myself - so like a brother, really - I felt that I had been happy and that I was happy again. For everything to be consummated, for me to feel less alone, I had only to wish that there be a large crowd of spectators the day of my execution and that they greet me with cries of hate."

Imagen tomada de Tierra de genistas.blog.com

Sleepless in Queens

Continuando con el meme de nunca acabar:

# 6. Me gusta dormir muchísimo, aunque no siempre logro dormir bien. Son las 2:13 AM y estoy aquí escribiendo este post, ya que un ataque de insomnio me ha robado el sueño.

Odiaba las noches como éstas porque no sabía qué hacer con mi falta de sueño, y me ponía de muy mal humor; hoy sé que eso empeora la situación; y mi estrategia ha cambiado: hago los quehaceres, leo, escribo o escucho música clásica para relajarme. Esta noche he hecho un poco de todo eso, y aún sigo despierta. Lo único bueno del desvelo fue que pude terminar la novela que estaba leyendo, The Stranger de Camus.

El día llegará pronto, y me encontrará con el cansancio que me dejó ayer; de seguro que me traerá un sinnúmero de actividades que requerirán unas energías que yo no tendré si no duermo, por lo menos cinco horas.

jueves, 28 de junio de 2007

Soy más feliz en verano

Continuando con el meme de nunca acabar:


# 5. Definitivamente soy una persona muchísimo más feliz en verano que en resto del año. Eso no sólo tiene que ver con el hecho de que soy una de esas personas que necesitan la energía solar para sentirse bien -obvio soy caribeña-, sino también con el estilo de vida que llevo. He aquí algunas de las razones:
  • No tengo que trabajar.
  • Disfruto del sol, el mar y la arena.
  • Los chicos se notan más saludables.
  • Como al aire libre frecuentemente.
  • Paso mucho tiempo con mis amigos.
  • Me doy el lujo de hacer lo que quiero, sin preocuparme del reloj.
  • Paso tiempo en mi casa -ésta deja de ser el lugar donde sólo llego a dormir.
  • Tengo tiempo escribir y leer -en lo que llevo de vacaciones me he leído una novela y voy por la mitad de otra :-).
  • No me levanto a las cinco de la mañana.
  • Observo mi entorno más detenidamente.
Siempre trato de implementar algunas de estas estrategias en el resto del año pero siempre pierdo la batalla entre tanto quehacer....

miércoles, 27 de junio de 2007

I am the Queen of the "To-Do List"

Continuando con el meme de nunca acabar.

#4. Acostumbro hacer una lista de las cosas que tengo que hacer. Por lo general, la hago antes de salir del trabajo cada día. El poner en papel los pendientes me mantiene enfocada y me ayuda a manejar mi tiempo de manera más efectiva.

La verdad es que estoy en todas menos en misa -como dice mi madre-, por lo tanto suelo tener demasiadas cosas que hacer; por eso cuando miro la lista y me doy cuenta de todas las cosas que he terminado en el día, siento el impulso necesario para continuar. Creo que es una cuestión psicológica, jajaja, pero a mí me funciona muy bien.

lunes, 25 de junio de 2007

Mi mayor fobia

Continuando con el meme

#3. Le tengo terror a las culebras. Creo que la fobia surgió cuando tenía unos cinco o seis años, y, por accidente, pisé una culebrita de jardín. Todo lo que recuerdo es haberla visto bajo mis pies, y luego echarme a correr sin parar. Desde ese día, no he podido librarme del miedo que sentí, y que aún siento cuando veo el endemoniado bicho.

Es tal mi miedo que cuando duermo en el campo, hay que meterme un mosquitero hasta lo más profundo del colchón. Así de patético es mi miedo; aún hoy que vivo en un 5to piso, en las noches de verano suelo levantarme a revisar que las ventanas no estén abiertas, y por casualidad vaya y se me meta una al apartamento, jajaja. Mis compañeras de la universidad se burlaban de mi porque solía cubrir la brecha que quedaba entre el piso y la puerta para impedirles su entrada - por lo menos eso era un monte en el medio del mundo, pero en la Ciudad de Nueva York, ¡ay Dios!

El verano pasado mientras estaba en la Florida, casi me muero de un susto cuando vi una culebra en el patio de la casa. Aunque algún día pensé jubilarme en la Florida, hoy estoy considerando seriamente deshacerme de aquél nidito que pudo albergar mis últimos días, y todo por las malnacidas culebras.

Imagen tomada de Possibilidades.com

domingo, 24 de junio de 2007

"In the heartland of America"

Continuando con el meme.

#2. Me encanta hacer viajes por carretera. En el 2003 me fui de viaje con mi amiga Grace. Nuestro destino final era Seymore, Indiana. Cuando Grace me pidió que la acompañara, no pude resistirme a preguntarle pero ¿a hacer qué? Lo único que había oído mencionar de Indiana eran las 500 millas de Indianapolis. En cambio para mi amiga, Seymore valía la pena por ser el Small Town de John Mellencamp; ¿de quién?-le dije. No tenía la menor idea de quién era John Mellencamp, pero acepté... El viaje por
The Heartland of America resultó ser interesante, tanto así que tuvimos a punto de ser arrestadas. Es que para mi amiga no fue suficiente con haber visitado todos los sitios donde había vivido, o visitado su ídolo. ¡Qué va! Se obsesionó con ir hasta su residencia en las afueras de Bloomington.

La casa estaba en la cima de una colina, rodeada de hectáreas cubiertas de un espeso bosque -en otras palabras inaccesible para la vista de los intrusos como Grace; Haber llegado hasta la puerta de la casa de Mellencamp, la hacía sentirse más feliz que si se hubiera sacado la lotto; su felicidad la hubiera coronado la oportuna llegada de John Mellencamp, pero no sería el quien llegara, sino su esposa con sus dos hijitos; la señora entró apresuradamente -visiblemente nerviosa por nuestra presencia. Unos minutos más tarde unos señores se nos acercaron, y pensé lo peor: la policía vendría por nosotras. Era sólo cuestión de tiempo. A mí me entró un miedo horrible, así es que me costó sacudirla, y hacerle ver el cuadro ante el que nos encontrábamos. Empecé a imaginarme las sirenas de los carros de policía que nos perseguían, les siguieron las esposas, las rejas, y los titulares de los periódicos. Pero Grace no reaccionaba, seguía ahí esperando ver a John Mellencamp.

viernes, 22 de junio de 2007

"Yo, la primogénita de la familia"

Les debo un meme a JuniHH, Hetayra, Osita Jenny y OJ.

Aunque soy una excelente estudiante, no me he animado a hacer esta tarea. La razón es que ya he leído este meme hasta el cansancio, y me imagino que todos nos sentimos igual; además no me gusta hablar de mí así tan directamente, prefiero que se lo imagen.

He decidido que haré mi tarea aunque un poco a mi manera. Pues si se han dado cuenta, no soy muy partidaria de seguir las reglas simplemente porque sí, jajaja. El plan es el siguiente: publicaré 8 posts cortitos en vez de uno con ocho cosas sobre mí. Sin ningún orden específico. No sé que les contaré; les revelaré lo que se me ocurra al momento de escribir las entradas.

#1.
Soy la primogénita de la familia: la primera nieta, la primera sobrina por ambos lados de la familia. Fui una niña muy querida; sin embargo, luego empezaron a llegar hermanos que vinieron a destronarme y darme responsabilidades. Tuve que empezar a compartir todo mi universo con ellos, y como consecuencia me hicieron crecer demasiado rápido. Esto no me hacía ninguna gracia, pero hoy he leído un artículo en el New York Times que me ha reivindicado. El artículo es sobre un estudio que concluye que que los primogénitos suelen tener un coeficiente intelectual más alto, ser más disciplinados, más centrados y mucho más exitosos -en otras palabras estaban hablando de mí :-).

Si me hubieran preguntado, se hubieran ahorrado muchísimo tiempo y trabajo :-). Pues sí, estoy convencida de que los primogénitos no sólo somos más inteligentes, sino también muchísimos más responsables e independientes; y como si eso fuera poco, solemos sacarles menos canas verdes a nuestros padres :-). (Por fa no le pasen la voz a mis hermanos que me linchan).

Continuará

martes, 19 de junio de 2007

Una experiencia esperpentica

A bordo de un tren Valencia-Madrid, 25 de febrero 2007

Haber conocido Valencia de la mano de Naty fue una experiencia valleinclanesca. La verdad es que hay que conocerla para saber que el apodo Esperpento le viene como anillo al dedo.

Hace tiempo que me vengo preguntando, ¿cómo es posible compenetrarse tanto con gente que se conoce a través de un blog? No logro entenderlo del todo. ¿Quién me hubiera dicho que conocería Valencia en compañía de Nati? No recuerdo como empezó nuestra amistad, lo cierto es que he tomado un tren por casi 3 horas y media para ir a su encuentro... Mi madre hubiera puesto el grito en el cielo -menos mal que no tengo que pedirle permiso.

El reloj marcaba las doce y veinte de la tarde, y Nati me esperaba en la estación de trenes. Así empezó mi aventura esperpéntica. Pasamos la tarde en el apartamento de su amiga Gloria. Al atardecer nos fuimos a la playa Malvarrosa; al llegar saqué todos mis cachivaches, y nos marchamos a la playa. Hacía una temperatura espectacular. La caminata por la playa me encantó. La brisa suave del mediterráneo hacia volar mi pelo al tiempo que la ciudad desfilaba frente a mis ojos de extranjera.. La senda pavimentada estaba cuajada de estrellas del cine europeo. A decir verdad no los habían honrado con estrellas sino con palmitas. Nos detuvimos en una palmita cuyo pavimento estaba roto. Nati me aseguró que lo habían roto adrede. Nagui Mahfu era el único musulmán de todo el grupo, y el único que había sufrido dicha suerte. El pavimento se veía como nuevo, sin el uso suficiente que ameritara dicha lesión. Un frío que se me enredo en el estómago. El incidente de la palmita disfrazada de estrella, me recordó lo absurdo que es nuestro mundo. Se nos hace responsables de toda una estirpe; sólo somos colectividad, pero ¿dónde queda el yo, el individuo? Hecho polvo en la colectividad. Nos disfrazan el ser con banderas, religiones y etnias… Nos hacen tan pesada la carga; tantas distinciones sólo sirven un propósito: satisfacer el ego de los hombres mediocres. Hombres que carecen de valor intrínsico, que viven porque respiran, pero que jamás han estado vivos. Jamás han dejado libre su espíritu, subyugado, sepultado bajo tantas incoherencias sociales.... Así veía el mundo en mi interior, pero afuera, Nati me mostraba orgullosa su ciudad y yo me dejaba arrastrar por su magia. La noche se nos vino encima, entre risas y charlas, y se llevó con ella las experiencias vividas. A partir de ese momento, sólo existirían en mi memoria...

Pronto se hizo hora de cenar y de volver al nido; decidimos no tapear muy lejos de casa... Así concluimos nuestra primera “pateada” por las calles valencianas. Al regresar a casa –cuando pensábamos que la aventura había terminado- Nati se enfrentó en una lucha de titanes con con el calentador. Yo por mi parte, trataba de bajar una persiana que se había subido a lo más profundo de la ventana. Es seguro que esa persiana -hasta entonces- no había experimentado dicha profundidad. La persiana se hizo caracol, y se enroscó en su concha. Si no hubiera quedado el cordón -donde hace unos minutos existió la persiana plegable- nadie hubiera notado su ausencia. Al darnos cuenta que ninguna de nuestras empresas tendrían resultado, decidimos dar por terminado nuestro día: Nati viendo un clavo en la tele, y yo tumbada en el sofá esperando a Orfeo.

A la mañana siguiente saludamos el nuevo día. Nati me serviría de guía turística por la Valencia del Cid. No hay mejor manera para conocer un lugar que andar de la mano de alguien que viva allí. Me llevó por esos lugares fuera del alcance de los turistas... De pronto, me vi transportada a la época medieval. Estaba en el patio de La Lonja, sentada sobre la pila, imaginándome a doña Jimena allí sentada a la espera de El Cid Campeador. ¡Oh Jimena, todo un modelo de entrega y dedicación medieval! Al rato termina la espera, se asoma por la puerta el Cid de las batallas herculescas; ahora viene el invencible guerrero a librar otra batalla, menos violenta: viene dispuesto a montar a su mujer, a rejuvenecerse entre unas piernas que nunca se le resistiría; eso sería inconcebible para el Cid, porque ella existía, exclusivamente, para complacerlo…
Un aire fresco, perfumando de naranjos me sacó de mis cavilaciones; y vi a Nati dispuesta fumarse cigarrillo. Está convencida de que se puede fumar, porque ha visto una colilla de cigarrillo en el suelo; para Nati, esa es la prueba irrefutable que le demuestra que se puede fumar, aunque haya un letrero que lo prohíba.

Nati, mil gracias por soportarme todo un fin de semana, y por haberme dado la pateada de mi vida. Eres un encantó. Me lo pasé de lo mejor. La próxima vez me meto a la playa. Te sigo debiendo el post de la torre y el alemán.

domingo, 17 de junio de 2007

¡Qué día!

Hay días en los que pareciera que todo debe salir mal. El viernes me desperté un poquito enferma, se me pegaron las sábanas, y cuando llegué al trabajo alguien se había estacionado en mi lugar. En vez de estacionar en el número 27 me estacioné en el 8. Sabía que estaba usurpando el lugar de alguien pero yo no había sido la única; el viernes los estudiantes llegaron al colegio a las 6:30 de la mañana para el ensayo de graduación; como nadie se lo impidió se estacionaron donde mejor les pareció

Unas cinco horas más tarde, llegó a mi aula una de las secretarias del colegio con cara de que algo andaba mal: "Un estudiante ha chocado tu carro" vete a la oficina. Al llegar a la oficina el chico estaba todo apenado, nervioso y muy preocupado. Lo siento mucho Srta. -me dijo. "Traté de salir con mucho cuidado pero no pude evitar golpear su coche. Mis padres pagarán por todo, no se preocupe." En ese instante reeviví lo majadero que era cuando estuvo en mi clase.

Me quede fría, imaginé mi carro hecho un tostón, me pregunté ¿por qué diablos me estacioné en ese lugar precisamente? Si no me hubiera estacionado ahí mi coche aún fuera virgen, pero ni modo ya ni llorar ya era bueno. Le dije vamos a verlo. Por suerte, el daño fue mínimo. Luego de la inspección, hicimos copias de su registracion y de los papales del seguro. Aunque estaba fastidiada porque me había rayado el carro; le di las gracias por haber sido honesto, y haber reportado el accidente. Fue bueno ver que aquel chiquillo inmaduro y majadero que alguna vez tuve en clase ya se está haciendo hombre responsable.

jueves, 14 de junio de 2007

La campaña ¡Ya es hora! de univision y la ética periodística

El New York Times publico hoy un articulo sobre los efectos que ha tenido la campaña ¡Ya es hora¡ de Univisión en los televidentes. Esta campaña promueve la ciudadanía americana entre los residentes que son elegibles. Según el artículo, la cantidad de postulantes para la ciudadanía se ha aumentado desde que Univisión inició dicha campaña. Así lo confirman datos del Servicio de Naturalización, el cual recibió 404,448 solicitudes entre enero y abril, y sólo 251,428 durante la misma época el año anterior.

El artículo aborda la cuestión de la ética en el periodismo. Según Dante Chini, un prominente investigador de Project for Execellence in Journalism, Unisvision hace algo que los demás canales no hacen: inmiscuirse en los asuntos de la comunidad. Chini afirmó que la comunidad hispana espera que sus canales sean activistas en pro de sus causas, y que Univision usa la campaña como tactica para atraer televidentes. Del mismo modo, indicó que en las transmisiones de Univsion persiste la practica de adoptar un tono de "nosotros contra ellos."

Por su parte Ray Rodríguez -presidente de Univisión- dijo que el activismo del canal es completamente ético ya que no hay nada de malo en ayudar a la gente que debería estar votando.

Estoy de acuerdo en que el periodismo debe permanecer al margen de los intereses individuales; sin embargo, en este caso me parece que el señor Chinni exagera bastante la situación y está mezclando la gimnasia con la magnesia. No sé como él sabe -ya que no aportó pruebas de ello- que el móvil de Univisión es aumentar su audiencia. La verdad es que Univisión es uno de los canales más visto en las áreas urbanas de los Estados Unidos, y por lo tanto no creo que necesite esa publicidad barata. Por mi parte, no soy fanática de Univisión, sin embargo, en esta ocasión creo que deben ser elogiados y no criticados. En lo que he podido observar la campaña trata de informar a inmigrantes que podrían convertirse en ciudadanos, y por falta de información no lo hacen; así como de concientizar a un sector de la población hispana que se ha resistido a nacionalizarse por sus fuertes nexos con sus países de origen.

En este momento hay en los Estados Unidos 8 millones de residentes legales aptos para solicitar la ciudadanía, y la gran mayoría de ellos son hispanos -entre ellos algunos de mis familiares que tienen mas de tres décadas en el país.

¿Qué saben las flores que los humanos ignoran?

Los titulares de hoy me atraviesan el estomago como un frío puñal. Me siento totalmente impotente y desarmada a para hacerle frente a la locura del mundo moderno. Hoy en Palestina Fatah y Hamas, y en Irak sunitas y chiítas se matan hermanos entre hermanos. Los grupos que supuestamente defienden la misma causa se despedazan entre sí. Esto me confirma una vez más lo que siempre he pensado de los grupos que defienden causas con violencia: lo único que buscan es su propio beneficio, y para lograrlo tienen que mantener a los ciudadanos en la ignorancia. Tienen que agitar con la estupidez de un nacioalismo desmedido y un absurdo fanatismo religioso.

Se me ocurre entonces que en el jardín hay dalias, rosas, geranios gardenias. Todas se alzan orgullosas de ser quienes son; todas se aferran al terreno que las sostiene; todas forman un universo de colores sin que ello amenace la existencia de las demás. ¡Qué civilizadas son las flores!

Las flores al igual que nosotros nacen, crecen, se reproducen y mueren. Sin embargo, no votan, no van a la iglesia, no se preguntan de dónde vienen ni a dónde van. Simplemente viven su tiempo, pasan el ciclo; y cuando se mueren tampoco les preocupa si van al cielo o al infierno. Afortunadamente para ellas, nada de eso forma parte de su existencia, y no por ello son menos importantes o menos hermosas que nosotros.

Nosotros, los seres humanos -los que por nuestra inteligencia y capacidad para razonar encabezamos la pirámide de la vida del planeta- le restamos tanto a nuestra experiencia vital por nuestra absurda forma de pensar. Nuestras vidas están subjugadas por la política, por las normas de una sociedad corrupta, por la religión con su cielo lejano y ajeno, y con su conviniente infierno de ficción. Usamos nuestra inteligencia para destruirnos, para engrandecernos, para encadenarnos al pasado y al futuro. Nos olvidamos del presente, el único tiempo real, porque el pasado ya pasó y el futuro no es más que una proyección de nuestro pasado.

Yo me resisto no quiero ser parte del circo humano. Yo quiero vivir como las flores para ser libre, sabia y feliz.

Foto tomada de
Graham Matthews' Home Page

miércoles, 13 de junio de 2007

Un bosque de algodón entre desiertos azules

Hay seres que tenemos el privilegio de trascender el engaño de la vista. Para nosotros, los seres quijotescos, nada es lo que parece. Vemos la esencia que se oculta detrás de la apariencia... No es fácil explicarle esta "discapacidad" a los seres que no la padecen.

En mi último viaje a la República Dominicana, disfruté de un vuelo placentero, y de una vista espectacular por el maravilloso día que hacía. Desde mi ventana, yo añadía pinceladas imaginarias a un cuadro que en sí era ya hermoso. A mi lado, viajaba un Juan de los Palotes que se encargaba de separarme de mi paisaje encantado, de ese hermoso cuadro que la naturaleza y yo habíamos creado juntas. “No sé que tanto ves por la ventana. Yo sólo veo nubes" -me dijo. En cambio, yo veía mucho más, pero preferí escribirlo a compartirlo con un ciego a quien le ha sido negada la capacidad de soñar con consciencia. He aquí el hermoso cuadro del que se perdió aquel Juan de los Palotes:

Diario de viajes
29 de marzo de 2007

Tras la ventana, se forman unos hilos invisibles que convierten algodones flotantes en árboles. Su sombra se proyecta sobre un extenso desierto azul. La arena forma surcos como la espuma de las olas del amar. Pero no es el mar, es un desierto azul a la sombra de un bosque de algodón….

Por encima del desierto, una fina escarcha, transparente, reposa tranquila. Y, arriba, en lo infinito, otro brillante reflejo azul, y en entre ambos azules, navego yo plácidamente… De pronto se acerca un algodón gigante que viene a ocultar mi universo azul. El avión resbala, pero sigue su curso, persiguiendo las directrices invisibles que lo guían hacia su destino final. Ante mis ojos aparece un glacial de apenas horas, aunque da la impresión de haber existido desde siempre… Mi mirada se pierde sobre su extensión, y lo veo abrazarse con el cielo. Se me ocurre entonces que tal vez, los que vengan después de mí no logren verlo, a pesar de que ahora se imponente, majestuoso en medio de los desiertos que oscurece... Sin embargo, a pesar de su tamaño, puede ser susceptible a los embates del sol, dejar de ser un iceberg flotante, y volver a su antigua forma… y ya no ser más una sólida escarcha para diluirse en el desierto líquido que ahora opaca; y entonces, nadie –ni siquiera yo que lo he visto- recordara que estuvo ahí agazapado, oscureciendo mis dos desiertos azules....

Foto tomada del blog de Katrin

Mensajero matinal


Esta mañana me pareció sentir que la muerte se me enredaba entre la piel; la miré de frente con valentía, y ella me devolvió un guiño burlón. Un rayo de luz la desvaneció en su esplendor. Recordé entonces que ella y yo tenemos asuntos pendientes. Hoy saldré a la calle y aspiraré el aire, y lo saborearé como nunca, plenamente consciente de que ella y yo nos volveremos a encontrar a la vuelta de cualquier esquina.

Imagen: calaca por artesanos de Guerrero

martes, 12 de junio de 2007

¿Aprendimos algo del caso Loving vs. Virginia? La verdad, no mucho.

El 12 de junio de 1967, la Suprema Corte de Justicia declaró inconstitucional la ley de Virginia que prohibía el matrimonio entre personas de diferentes razas. En el caso Loving vs. Virginia, la Corte falló a favor de Richard Loving al afirmar que:

"El matrimonio es uno de los “derechos civiles básicos del hombre”, fundamentales para nuestra existencia y sobrevivencia. Negar esta libertad fundamental tomando como base una teoría sin fundamentos que tiene como eje central clasificaciones raciales que atentan el principio de igualdad, principio que se encuentra junto al corazón de la decimocuarta enmienda. Dicha enmienda estipula que la libertad de elección a la hora del casamiento no debe ser restringido por discriminaciones raciales. Bajo nuestra Constitución, la libertad de casarse o no con una persona de diferente raza reside dentro del individuo y no puede ser infringida por el Estado" (Loving vs. Virginia)

Hoy 12 de junio se cumplen cuarenta años de dicho dictamen; precisamente hoy, se me ocurre preguntarme, ¿qué tanto hemos aprendido de Lovings vs. Virginia? Me parece que no mucho. ¿por qué no permitir que cada individuo haga con su vida lo que mejor le plazca? En este día tan simbólico, aprovecho para recordar que en este preciso momento hay hombres y mujeres a quienes se les siguen negando su legítimo derecho de contraer matrimonio con la persona que han elegido. Superamos el impedimento del color de la piel, pero no así el de la orientación sexual.

Por lo menos a mí, se me hace tan ridículo que en pleno siglo XXI sigamos decidiendo con quien las personas pueden casarse.
Espero que ante la inercia del gobierno federal respecto al matrimonio entre homosexuales, lo estados tomen carta en el asunto, y sigan el modelo de estados como Massachusetts. En el estado de Nueva York en este momento se debate la propuesta del gobernador Elliot Spitzer, que legalizaría el matrimonio entre parejas del mismo sexo. Ojalá que la medida sea aprobada, y que se les garantice, de una vez por todas, la protección legal que estos hombres y mujeres se merecen. No es justo que hombres y mujeres, como mis amigos Gary y Murdoch, tengan que irse a otro lugar para unirse en matrimonio, simplemente por su orientación sexual; y mucho más injusto aún es la exclusión, y el desamparo legal al que son sometidas dichas parejas.

Gary y Murdoch se casaron en Canadá en septiembre del 2005, ambos son activista por los derechos de los homosexuales.


lunes, 11 de junio de 2007

¿Sobrevirá el español el influjo de anglicismos?

Los puristas suelen alarmarse porque el español se está llenando de anglicismos; creo que lo que está ocurriendo, es un proceso natural y no por ello el español va a desaparecer o a deteriorarse como quieren hacer creer algunos. La verdad es que hoy hay tantos anglicismos como galicismos e italianismos en épocas anteriores. Esos términos foráneos de ayer se asimilaron al idioma, y hoy nos son tan nuestros que ni nos percatamos de que provienen de otros idiomas. Estoy segura que con los anglicismos ocurrirá exactamente lo mismo. En el español de hoy día, no está sucediendo nada que no haya sucedido en otros momentos históricos. Por si tuviéramos alguna duda, ni han cesado el influjo de palabras extrajeras ni la histeria que produce su llegada, como siempre ha ocurrido.

Las nuevas palabras surgen de la necesidad de identificar objectos o conceptos; y, si éstos son importados suelen traer consigo sus propio nombres, muy a pesar de que el idioma que los recibe ya tenga palabras similares. Por ejemplo, la palabra charlar y y su equivalente en inglés to chat, nos han dado en español chatear. El verbo chatear es un anglicismo que ha entrado a nuestro léxico para describir conversaciones informales que tienen lugar en tiempo real por el Internet. Es obvio que charlar y chatear tienen significados y usos muy distintos en español. Es decir por Internet chateamos y cara a cara o charlamos. Los hablantes han establecido las reglas -por sí solos- de como y cuando se usan estos vocablos. A nadie se le ocurrió pedirle permiso a la Real Academia de la lengua Española. Sin embargo, eso no ha impedido que chatear ande de boca en boca abriéndose paso en nuestro diario vivir. La verdad es que desconozco, si la RAE ha aceptado, o tiene planes de aceptar el abusado anglicismo chatear. Lo que si sé de buena tinta es que todos a la hora de conversar por Internet chateamos -aunque la RAE no nos haya dado su consentimiento.

El español siempre ha evolucionado de acuerdo a la necesidad de expresarse de sus hablantes, aunque los miembros de la RAE brinquen, salten o pataleen. Es extremadamente improbable que una innovación lingüística sea frenada por dictamen de la Academia; especialmente, si se ha manifestado en todos los estratos de la sociedad. Tratar de regular una innovación que se esparce como pólvora es nadar contra corriente. Es por ello que creo que los anglicismos han llegado para quedarse, y estoy segura de que poco a poco se asimilaran al idioma, y todo seguirá como hasta ahora -para tranquilidad de los puristas; y a los que tengan miedo de perder su capacidad para comunicarse, les aseguro que nadie se quedará mudo de la noche a la mañana a causa de los anglicismos.

Imagen tomada de Univision.com

sábado, 9 de junio de 2007

A la mierda con la derecha y la izquierda

Muchas veces he dicho que mi único compromiso es con el individuo, y que por tanto me valen madre los religiosos, y los políticos -ya sean de izquierda o de derecha. Tengo la capacidad para criticarlos a todos, y saber que ningunos son blancas palomitas. Es triste ver que tanto la izquierda como la derecha le han fallado al ser humano, pero mucho más triste aún, es ver que mucha gente sigue ahí, inmóvil como montaña, defendiendo estas ideologías como verdades absolutas que pueden solucionar los problemas del mundo.

Me parece vergonzoso que en el siglo XXI, ambos, la izquierda y la derecha se den el lujo de de defender lo indefendible, sólo por avanzar sus respectivas "agendas." Un ejemplo aún fresco en mi memoria, es el caso del cierre de la televisora RCTV por una pataleta de Hugo Chávez. Me he encontrado con artículos en defensa a dicha clausura por considerarla beneficiosa para el "pueblo." En lo personal, no puedo tolerar el abuso de poder ni la censura, sin importa de dónde provengan. Es vergonzoso ver a intelectuales alabando la represión, y los atropellos a los derechos individuales, a estas alturas del juego. Me pregunto, ¿cuántos siglos más de represión tendremos que soportar para que abran los ojos a la realidad de los políticos y su demagogia?¿Considerarán algún día la mínima posibilidad de que tal vez se hayan equivocado en creer que un tipo de represión es mejor que otro?

Yo me siento totalmente libre, sin compromiso con nadie que no sea la libertad misma. No tengo la necesidad de defender las acciones de ningún político. Creo que el fracaso de la izquierda y la derecha radica precisamente en creer que tienen la obligación de decidir lo que es bueno o malo para los ciudadanos. Se me hace tan irónico que Chávez con su cantaleta de democracia, de libertad, de igualdad, no pueda tolerar una voz disidente. La verdadera democracia es aquella que no silencia la voz de nadie, y permite que sean los individuos los que decidan, por sí solos, lo que hacen, escuchan o leen, sin la necesidad de un "patriarca" sabelotodo que decida que es perjudicial o beneficioso para ellos. En el caso del cierre de RCTV ambos bandos se han dado banquete aprovechándose de la situación, y se han olvidado de la única víctima de todo el asunto: la libertad de los ciudadanos -irónicamente por quienes ellos dicen abogar.

Cuadro de Charles Ramer

viernes, 8 de junio de 2007

Sobreviví mi primera lectura en público

Ante todo, quiero agradecer a Juan N. Tineo por haberme invitado a leer. Juan, es un colaborador del congresista José Peralta, en promover el arte en la comunidad hispana de Queens. De igual manera quiero agradecerles a ustedes, sus lindos comentarios, mil gracias. El apoyo que recibo de ustedes es una de las razones por las que me gusta tener un blog. Su muestra de cariño y apoyo, me acompañan más que el de la gente que está físicamente cerca de mí. Siempre he creído que la cercanía nubla la mirada, y nos impide ver lo que tenemos en frente; la cercanía suele decaer en invisibilidad. Sin embargo, ustedes que sólo me leen en el mundo virtual, lejano y ajeno, no tienen otra alternativa más que verme.

Anoche fue la tertulia. La anticipación del evento me tenía muy nerviosa, pero a la hora de la verdad, hice lo que tenía que hacer -como siempre lo hago. En el momento que me levanté a leer, los nervios cedieron, y me sentí tranquila. Primero, hablé un poquito del proceso interno que siempre precede lo que escribo, de mi relación con el mundo interior y exterior. Les conté de mi manía de inventarles historias a rostros con los que tropiezo en el tren o por las calles. Así como de los conflictos entre mi blog y mis libros. También, les revelé lo que siento cuando me veo en la profundidad de unos ojos, y cuando pienso en los niños en la paz y en la guerra.

Al terminar la tertulia, hubo quien se me acercó para decirme lo mucho que le gustó lo que leí, pero también hubo quien me ignoró. También, apareció quien me incentivara a seguir escribiendo, y por supuesto que no faltó quien tratara de ligarme. Pero en fin, todo salió mejor de lo que yo había anticipado, creía que las palabras se quedarían atragantada y no saldría, pero eso no ocurrió. Me sentí bien, y satisfecha con mi rendimiento en el evento. En general, la audiencia fue muy amable conmigo, me regalaron aplausos y sonrisas. Sin embargo, lo que se quedó conmigo al final de la velada fueron las palabras de un chico que se me acercó para invitarme a las tertulias de un círculo de escritores que se reúne en el Village a compartir sus escritos. Lo que más me gustó de nuestra conversación, no fue la invitación en sí, sino algo que dijo mientras conversábamos: "nosotros, sólo somos el medio por el cual se expresa una energía que está ahí flotando. Nosotros no hemos inventado nada. Sólo somos miembros de una tribus que ha existido siempre, pero que siempre ha sido minoría, siempre menospreciada por la sociedad."

imagen tomada de Chemalera

miércoles, 6 de junio de 2007

Por favor piénsenlo bien antes de decir sí

Sucede que me invitaron a leer algunas cositas de las que he escrito. No sé por qué ni para qué dije que sí; creo que no escuché bien lo que me estaban pidiendo o no entendí lo que me pedían que hiciera. Para cuando me cayó el veinte ya era tarde, mi nombre ya había sido impreso en el programa del evento. La verdad que no me hace ninguna gracia estar leyendo entre un reguero de tacos. Siento unas ganas enormes de rajarme.

El evento es mañana, y ya estoy nerviosa. Ojalá haya aprendido la lección, y la próxima vez que me pidan leer en público lo piense mejor. Aunque conociéndome, lo dudo. Siempre meto la pata. Pero, ya ni llorar es bueno, así es que tendré que lanzarme al charco, y tratar de nadar.

Cuadro: Tertulia en el café paraíso

lunes, 4 de junio de 2007

"Bug" de William Friedkin

Bug es la nueva película de William Friedken, mejor conocido como el creador del Exorcista. Para algunos críticos Bug es su mejor película en 20 años, y para otros es todo un desastre fílmico. Lo que está claro es que Bug, no es popular. No es para todo el mundo.

A mí me gustó. Es un
a película difícil de encasillar, la han promovido como una película de horror, pero no lo es del todo. Bug es en principio un filme psicológico, pero poco a poco va adquiriendo dimensiones características de los filmes de horror. Las acciones de los personajes van en forma ascendentes hacia el desquicio total y el horror. En Bug no encontrarán nada que infunda miedo per se: no hay monstruos, ni asesinos en series. Ni siquiera hay insectos (bugs) –esos sólo los ven los protagonistas. Sin embargo, el filme crea un ambiente escalofriante, que emerge desde lo más profundo de las mentes de los protagonistas; y de ese modo pasamos a movernos, ya no en lo cotidiano sino en algo fuera de serie, y completamente espeluznante: los rincones mas oscuros de una mente perturbada.

La trama es simple, tiene lugar en un motelucho en Oklahoma. Es la historia de dos seres literalmente consumidos por su realidad. Agnes, una desafortunada y temerosa mesera que se refugia en el alcohol y la cocaína para mitigar su traumático pasado, y Peter un veterano de la guerra del Golfo, que cada vez más se nos revela como un ser paranoico con matices esquizofrénicos.

Las vidas de Agnes y Peter se cruzan para mitigar sus miserias y alimentar sus miedos. Agnes encuentra en Peter protección, y Peter encuentra en ella a alguien que escuche sus incoherencias. Poco a poco, y sin darse cuenta Agnes se convierte en un personaje en la historia de Peter. Sin embargo, Agnes no es un personaje pasivo, que se limita a ser creación, ella no sólo precipitara la caída de Peter, sino la suya propia. El filme nos hace preguntarnos, ¿hasta qué punto se necesitan Peter y Agnes? ¿es Agnes la excusa para que la historia de Peter exista, o es a la inversa?

No pasa mucho tiempo para que Agnes crea totalmente la historia de Peter. Según Peter, el ejercito le ha implantado unos extraños insectos -que sólo el puede ver- como parte de un plan para controlarlo. Poco a poco, Agnes empieza a ver los mismos insectos que Peter, y se va adentrando en su mundo hasta hacerlo totalmente suyo. Peter y Agnes se absorben en la historia del otro, hasta el punto de racionalizar hechos que pasaron hace diez años como partes de la conspiración de la que son víctimas. Llegan a la conclusión de que para eliminar los insectos, tienen que desaparecer ellos primero. Peter y Agnes en su delirio por protegerse, transforman su espacio vital. Ese ya no es el mismo, lo han convertido en una cárcel para protegerse de un enemigo que sólo ellos pueden ver; un enemigo engrandecido por sus miedos y su paranoia.

Agnes y Peter se recluyen en un espacioclaustrofobico, totalmente desconectados del mundo exterior. La única realidad es la que proyectan sus mentes, distorsionadas por un creciente estado de paranoia. En el subtexto del filme hay mucho más que un ataque compartido de paranoia. Ese miedo a “un enemigo” omnipresente, que hay que exterminar tienen resonancias que rebasan de la ficción. Es irónico, que lo que destruirá a los protagonistas, no son sus enemigos, sino su afán por eliminarlos. Sin embargo, ¿cuánto de esto es verdad y cuánto está en su imaginación?¿son ellos los creadores de una mentira que poco a poco se convierte en su verdad absoluta? ¿hasta qué punto puede un ser humano ser susceptible a las ideas de otros con acceso a información privilegiada?

La actuación de Ashley Judd y Michael Shannon es extraordinaria. Ambos hacen suyos sus papeles, dándole textura y profundidad. Sin duda, se merecen un oscar por su interpretación de Peter y Agnes, aunque dudo que ocurra. Bug vale la pena, es un filme pequeño que se engrandece con una impecable dirección y una excelente actuación.

Bug Photos: Harry Connick, Ashley Judd, Michael Shannon, William Friedkin. © Lions Gate Films

sábado, 2 de junio de 2007

¡Yo también los mataba, aunque hoy ya no puedo!

Nací en un campo de la Rep. Dom. en donde era normal agarrar una de las gallinas del patio, torcerle el pescuezo y guisarla. A mí jamás se me hubiera ocurrido cuestionarlo, pero ¿por qué habría de hacerlo? Eso era la norma en donde yo vivía. Eso era lo que hacíamos todos. Recuerdo lo bien que me sentí, el día que por primera vez pude agarrar una gallina, y al igual que mi madre pude torcerle el pescuezo. En ese momento me sentí realizada, a mis doce años ya era todo una mujercita.

Un día me trajeron a vivir a los Estados Unidos, y todo lo que yo había vivido estaba a punto de chocar con las nuevas costumbres a las que tendría que acostumbrarme. Nunca me imaginé, ni siquiera lo pensé, cómo el cambio me afectaría a un nivel psicológico y subconsciente. Hubo muchos cambios de los que fui consciente, pero jamás me imaginé como afectaría mi forma de ver el sacrificio de un animal para comer. Es curioso porque nadie nunca sostuvo una conversación conmigo sobre el tema. Ni siquiera me había dado cuenta de que el cambio había ocurrido en mí. Un día de visita a la Rep. Dom., sentí un profundo malestar al ver como mataban una gallina. Fue tanta la impresión que no pude comérmela, y me dije ¿pero esto era lo que yo había hecho hasta el momento de irme a los Estados Unidos?¿qué me había pasado? Parece ser que había internalizado las nuevas costumbres más de lo que yo misma me había percatado. Me había acostumbrado a comprar la carne en la carnicería, lejos del momento en el que el animal era sacrificado -nótese que ahora hablo de sacrificio. Hasta ese instante, no había vuelto a ver el animal con vida antes de ser guisado. Me imagino que hay una gran distancia entre comprar el animal listo para guisar, y verlo vivo, matarlo, desplumarlo, y luego guisarlo.

Me puse a pensar en esto ayer al escuchar un segmento de Radio Lab. El programa trataba de los zoológicos, y la forma como alimentaban a los animales que en su hábitat natural cazan para comer. En los Estados Unidos, los zoológicos los alimentan con animales ya muertos -pero claro, en algún memento estuvieron vivos. El programa comparó la práctica de los zoológicos estadounidenses a la de un zoológico en China, en el que los visitantes compran pollos vivos para echárselos a los animales.

Lo que más me llamó la atención de ambas prácticas -la china y la estadounidense- fue la reacción de la gente; para ellos no era más que un espectáculo, aplaudían y gritaban llenos de euforia. Sin embargo, los animales ajeno a dichos excesos, se limitaban asaciar una necesidad vital: comer. No había nada espectacular en lo que hacían: estaban haciendo lo que han hecho siempre cazar, y comerse sus presas. La única diferencia es que estos animales lo hacen el zoológico ante la mirada sádica de los humanos. De este modo, lo que es, y será siempre la ley de la selva adquiere una dimensión que no tiene. Es decir que para los animales comerse a los más pequeños es la regla del juego, y por lo tanto no tienen valoración ni buena ni mala; sin embargo, la participación -activa o pasiva- de los seres humanos la impregna de matices éticos y morales.

En mi caso mataba gallinas en el campo, porque fue lo que me enseñaron, esa era la regla del juego. Era la forma de adquirir carne para la alimentación. Sin embargo, me pregunto, ¿qué le habrán enseñado a los que se regocijan al ver los animales en cautiverio devorando presas que ellos les proveen?¿qué necesidad básica les cubrirá? Mientras más lo pienso menos encuentro la explicación.